Dentro de la comida italiana una de las salsas más populares que han llegado a volverse prácticamente internacionales es la de al pesto, la cual se basa principalmente en la albahaca para su preparación pese a poder poseer algunas variedades extra, como por ejemplo aquella en la cual se le agrega también espinaca a la preparación. El pesto, para ser un poco más exactos al respecto, nació en la región de Liguria, siendo su nombre una variante del genovés “pestare”, lo cual es utilizado para hacer referencia a la acción de moler algo en un mortero.
Viendo la receta más tradicional relacionada a la salsa de pesto los ingredientes que deberían estar presentes son el aceite de oliva; los piñones, semillas de algunas especies de pino; queso parmesano; ajo; sal; y claro, como parte fundamental la albahaca. Todos estos ingredientes deben molerse en un batán hasta poder idear una pasta suave.
Como ya se mencionó, esta receta suele variar según diversas partes del mundo ya que lo adecuan a los ingredientes que poseen localmente, siendo por ejemplo común que desaparezcan los piñones y se agregue almendras, tomate, espinaca u otros casos.