La pizza es una de las comidas rápidas más deliciosas que podemos disfrutar en cualquier parte del mundo, ya que su popularidad se expandido desde la bella Italia para deleite de todo tipo de paladar. Sin embargo existen personas que por algún motivo no tienen tiempo para visitar una pizzería o desean preparar su propia pizza en casa. Así que este post es para ellas y se centra en lo básico, que es la preparación de la masa para hacer la pizza.
Ingredientes
La masa para pizza es una receta fácil y sencilla que no lleva ningún misterio. Para su elaboración necesitaremos ingredientes básicos como harina de trigo, agua, aceite, de oliva, sal y levadura fresca de panadero o deshidratada. Esto se traduce en: 1kg de harina de fuerza, ½ litro de agua templada, 25 a 30 gramos de levadura de panadero fresca, 45 o 50 ml de aceite de oliva, sal a gusto.
Preparación
Comenzaremos haciéndonos de una mesa lo suficientemente grande para poder trabajar cómodamente la masa de la pizza. Tamizamos la harina y creamos un montículo con forma de volcán en un bol grande y al mismo tiempo añadimos el agua templada con la levadura bien desleída hacia el centro. A continuación batimos la masa apoyados por una cuchara grande de madera, batimos hasta que veamos que la masa comienza a despegarse sola de todas las paredes del bol.
Ahora agregamos el aceite de a pocos e incorporamos el punto sal a la masa a gusto. Recuerda que durante todo este proceso no debemos dejar de batir la masa que estamos preparando. En caso de no lograr la consistencia necesaria podemos ir añadiendo más harina.
Cuando la masa está completamente despegada de la cuchara de madera, le vamos a espolvorear un poco de harina sobre la encimera de la cocina para seguir amasando manualmente. Tenemos que lograr una consistencia y elasticidad adecuada para dejarla reposar 45 minutos en un lugar seco y cubierto por un paño de cocina para que la masa se ponga esponjosa. En poco más de una hora podemos tener lista nuestra masa para pizza.